La transición de la impresión matricial a la térmica revolucionó las operaciones comerciales al ofrecer soluciones de impresión más rápidas, silenciosas y eficientes. Mientras que las impresoras matriciales eran lentas, ruidosas y requerían mucho mantenimiento, las impresoras térmicas ofrecen impresiones nítidas y de alta velocidad sin tinta ni tóner. Industrias como el comercio minorista, la logística y la salud han adoptado ampliamente la tecnología de impresión térmica por su rentabilidad y fiabilidad.